Implementando el Enfoque por Competencias en el Currículo de El Salvador

Enfoque por competencias

En la búsqueda constante de mejorar la calidad de la educación, los sistemas educativos alrededor del mundo han ido evolucionando para adaptarse a las demandas cambiantes de la sociedad y el mercado laboral. Uno de los enfoques pedagógicos que ha ganado relevancia en los últimos años es el enfoque por competencias. En este artículo, exploramos cómo implementar este enfoque en el currículo de El Salvador, con el objetivo de preparar a los estudiantes para enfrentar los desafíos de un mundo cada vez más dinámico y exigente.

El Enfoque por Competencias: ¿Qué Significa?

El enfoque por competencias se centra en el desarrollo de habilidades prácticas y aplicables, más allá de la mera transmisión de conocimientos teóricos. Autores como Morales y Ruiz (2015) citado en Bizarro, Sucari and Quispe (2019) manifiestan que “concepto de competencia no es unívoco, se encuentran múltiples acepciones debido a que es multidimensional y se refiere a diferentes niveles del saber cómo saber-hacer, saber-ser, saber-estar, saber-convivir”. Esto significa evaluar acciones y actuaciones de los alumnos, no de memorizar una gran cantidad de datos o información.

En lugar de simplemente memorizar datos, los estudiantes aprenden a resolver problemas reales, aplicar conocimientos en situaciones concretas y desarrollar habilidades de pensamiento crítico, comunicación y colaboración. Este enfoque reconoce que el éxito en la vida no solo se basa en lo que se sabe, sino en cómo se pueden usar esos conocimientos en contextos diversos.

La producción del tema de competencias se originó allá por los años 90’s (Cazares, 2008, p. 55), y algunos autores las definen como “Una capacidad efectiva para llevar a cabo exitosamente una actividad laboral plenamente identificada” (Riesco, 2008, p. 82). Esta definición apunta a que el individuo debe de demostrar sus capacidades en el campo laboral a través de una conducta que es comprobable.

Razones para Implementar el Enfoque por Competencias en el sistema Educativo de El Salvador

El enfoque por competencias se presenta como una oportunidad, como señala Perrenoud (2009), para promover los aprendizajes y el rendimiento académico de los alumnos que enfrentan desventajas o carencias. Esto implica un respeto hacia los diversos estilos de aprendizaje de los estudiantes y busca establecer una evaluación equitativa que fomente el proceso formativo, es por eso que al implementar el enfoque por competencias en el currículo inicial al superior en el sistema educativo de El Salvador se lograra avanzar hacia lo siguiente:

  • Preparación para el Mundo Laboral: Las habilidades requeridas en el mercado laboral moderno están en constante evolución. La implementación de un enfoque por competencias garantiza que los estudiantes adquieran habilidades prácticas y transferibles que les permitan enfrentar los desafíos laborales con confianza.
  • Desarrollo Integral: Más allá del aspecto académico, el enfoque por competencias se centra en el desarrollo integral de los estudiantes. Se promueve el aprendizaje emocional, social y ético, lo que contribuye a formar ciudadanos responsables y comprometidos con la sociedad.
  • Aprendizaje Activo: En lugar de ser receptores pasivos de información, los estudiantes se convierten en participantes activos en su propio proceso de aprendizaje. La aplicación práctica de lo que aprenden estimula la curiosidad y la creatividad.
  • Inclusión: El enfoque por competencias reconoce que los estudiantes tienen diferentes estilos de aprendizaje y ritmos de desarrollo. Esto puede fomentar una educación más inclusiva al adaptarse a las necesidades individuales.

Consideraciones en la Implementación del Enfoque por Competencias en El Salvador

Aunque la implementación del enfoque por competencias promete beneficios significativos, también conlleva desafíos y consideraciones que deben abordarse de manera efectiva, ya que, en los nuevos escenarios sociales y tecnológicos las personas deberán de desarrollar nuevas competencias, particularmente quienes tengas acceso a una carrera universitaria y ejerzan como profesionistas. Contreras (2011) advierte que las personas deben de prepararse “en contextos multidisciplinarios y multiculturales, ya sea en forma directa o a distancia, en escenarios nacionales o internacionales… para enfrentar desafíos complejos, inéditos, abiertos”, lo que significa que se avecinan nuevos escenarios de trabajo para el futuro que esperan por profesionales con nuevas habilidades y cualidades para desempeñarse en un mundo moderno. Por lo que se requerirá:

  • Cambio de Mentalidad: La transición hacia un enfoque por competencias requiere un cambio de mentalidad tanto por parte de los educadores como de los estudiantes y sus familias. Es necesario comprender y aceptar que el aprendizaje va más allá de los resultados académicos tradicionales.
  • Formación Docente Continua: Los maestros necesitan capacitación continua para entender cómo diseñar actividades y evaluaciones basadas en competencias. Esto implica un esfuerzo constante para mantenerse actualizados en pedagogías innovadoras y metodologías de enseñanza efectivas.
  • Evaluación Auténtica: La evaluación basada en competencias se centra en el desempeño real de los estudiantes en situaciones auténticas. Sin embargo, diseñar evaluaciones válidas y confiables puede ser un desafío, ya que requiere más tiempo y creatividad que las pruebas tradicionales. El desarrollo de competencias implica un aprendizaje activo por parte del estudiante. El profesorado, por tanto, debe desarrollar una metodología que garantice la participación y actividad del alumnado. 

Por tanto, la utilización de las tareas de aprendizaje como evidencia para la evaluación facilita la integración y la coherencia entre el aprendizaje y la evaluación, al mismo tiempo que facilita una evaluación del proceso de aprendizaje y no sólo de los resultados (Villardón, 2006, p.64). Es decir que, las estrategias didácticas que están en línea con la evaluación de y para el desarrollo de competencias, que se basan en la puesta en práctica de elementos de las competencias para desarrollar tareas complejas en situaciones reales o simuladas a partir de la realidad, como el método de caso, y el aprendizaje por proyectos o problemas, deberían ser fuentes de información para la evaluación.

Diseño Curricular Equilibrado: Es crucial encontrar un equilibrio entre las competencias y los contenidos académicos. El enfoque por competencias no debe descuidar la importancia de adquirir conocimientos fundamentales en diversas áreas del conocimiento.

Infraestructura y Recursos: La implementación exitosa del enfoque por competencias puede requerir la inversión en infraestructura, como laboratorios, talleres y tecnología educativa, así como en la creación de materiales educativos adecuados.

Evaluación de Impacto: Es necesario llevar a cabo una evaluación constante para medir el impacto de la implementación del enfoque por competencias. Esto implica recopilar datos sobre el rendimiento académico, las habilidades desarrolladas y la preparación para el mundo laboral de los estudiantes.

Participación de la Comunidad: La implementación exitosa del enfoque por competencias también requiere la colaboración y participación activa de la comunidad educativa, incluyendo a padres, estudiantes y empleadores, para asegurarse de que las competencias desarrolladas sean relevantes y aplicables. La colaboración entre educadores, autoridades educativas, familias y la sociedad en general será esencial para lograr una implementación exitosa. 

La colaboración de los padres en los centros escolares demanda un papel activo, el de escuchar a los profesores. Los padres deben de ser parte de la solución en ofrecer una formación a los niños y jóvenes enfocado en la adquisición de habilidades blandas y duras y no ser parte pasiva del proceso de aprendizaje. Hernández y López (2006) advierten que muchas veces la participación de los padres en las reuniones o asambleas de los padres se limita a quejarse, pero “no saben cómo funciona la escuela, piden cosas imposibles, solo generan conflictos, no se ponen de acuerdo ni entre ellos mismos y no confían en el profesor”.

 Sostenibilidad: La adopción del enfoque por competencias debe ser sostenible en el tiempo. Esto implica un compromiso constante por parte de las autoridades educativas y una planificación estratégica a largo plazo.

La implementación del enfoque por competencias en el currículo de El Salvador representa un paso hacia la transformación de la educación en el país. Al centrarse en el desarrollo de habilidades prácticas y transferibles, se prepara a los estudiantes para enfrentar los retos de un mundo en constante cambio. Esta transición requerirá un esfuerzo colaborativo entre los educadores, las autoridades educativas y la sociedad en general, pero el resultado será una educación más relevante, inclusiva y preparada para los desafíos del siglo XXI.

A medida que El Salvador se embarca en este viaje hacia una educación centrada en las competencias, se sientan las bases para un futuro educativo más prometedor y alineado con las necesidades cambiantes de la sociedad y el mundo laboral.

 Referencias

Bizarro, W., Sucari, W., & Quispe-Coaquira, A. (2019). Evaluación formativa en el marco del enfoque por competencias. Revista Innova Educación, 1(3), 374-390.

Cázares, R. (2008). El enfoque por competencias en educación. Revista Ide@ s CONCYTEG, 3(39), 53-64.

Contreras, J. L. (2011). Formación de competencias: tendencias y desafíos en el siglo XXI. Universitas, (15), 109-138.

Hernández Prados, M. Á., & López Lorca, H. (2006). Análisis del enfoque actual de la cooperación padres y escuela. Aula abierta.

Perrenoud, P. (2009). Enfoque por competencias ¿una respuesta al fracaso escolar? Pedagogía social. Revista interuniversitaria, (16), 45-64.

Riesco, M. (2008). El enfoque por competencias en el EEES y sus implicaciones en la enseñanza y el aprendizaje. Tendencias pedagógicas.

Villardón Gallego, L. (2006). Evaluación del aprendizaje para promover el desarrollo de competencias. Educatio siglo XXI: Revista de la Facultad de Educación.

 

 

 

 


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